El actor, performista y director Alberto Kurapel es por un lado, uno de los autores escénicos más prolíficos y críticos cuyo trabajo se puede localizar en la escena teatral “marginal”. Uso este término entre comillas consciente de lo que significa en la llamada “escena teatral” , por otro lado es uno de los autores más omitidos siendo su obra una de las más desconocidas .
La pluma de Kurapel nos sorprendía el año 2020 en plena pandemia con la publicación de CALLEJONES Y CRISTALES , editorial Cuarto Propio, 10 textos de Teatro Performance (277 pág.) en los que Kurapel Alberto trata la dimensión de la Memoria Fantasma trazada a partir de una ruta de relaciones soterradas, que en el caso de Chile han sido manipuladas por siempre desde las oligarquías, lo que Kurapel Alberto explica así: “nuestra memoria ha sido deformada y jibarizada, pero hoy sus habitantes han dejado de ser parroquiales, vejados , corroídos por el individualismo, levantándose en una gigantesca protesta de dignidades contra las cúpulas gobernantes que han amparado la inequidad en la distribución de ingresos , imponiendo míseras pensiones a los ancianos, precaria atención en salud pública, sueldos mínimos exiguos que percibe la gran mayoría de la población, además del inmenso vacío político con una casi inexistente representatividad, más los “delitos de cuello y corbata” colusiones y justica tan distinta según sea aplicada a la clase media y pobre o a los detentores de las riquezas arrebatadas al país”.( pág. 14 , Callejones y Cristales 10 obras de Teatro-Performance / Alberto Kurpel/ edit cuarto propio primera edición marzo 2020).
El año 2021 el autor sorprende nuevamente con la publicación de “2020”, Teatro Performance / Trilogía sobre la pandemia, publicada por editorial Malamadre , en palabras del propio autor-escénico :
“La pandemia se ha encargado de exaltar de manera brutal, desfachatada, sentimientos/ comportamientos encubiertos. Esto es lo que expreso en “2020”. Pongo en escena la crueldad, el fanatismo, el servilismo, el dogma, la tortura, la obsesión en la incertidumbre y la construcción paulatina de otra mentalidad. Los argumentos son lo de menos. No es importante lo que se expone sino cómo se expone. (…) Esta pandemia nos exilió/ nos volvió a exiliar al 90% de los seres humanos, al 10% dueño, especulador, esclavista del mundo nadie lo exilia… aún.”
Ahora nuevamente su ingenio teatral nos invita a visitar su última obra , año 2022, CONTRALUCES DE LA ESCENA , edición de Editorial Cuarto Propio. Conociendo la obra de Kurapel Alberto, puedo decir que su práctica escritural es una de las más interesantes dentro del ámbito local, puesto que en cada texto desarrolla un nuevo enfoque desde un lenguaje teatral craquelado, en constante resignificación, donde el autor- escénico osadamente dice lo que ha sido omitido, suprimido, poniendo en valor una anti heroicidad con sus marginalidades. Esta característica es propia de la posmodernidad, poniendo en su trabajo , ya sea escritural o de puestas escénicas performativas, aspectos figurativos del pensamiento rehusado por los convencionalismos estéticos y los academicismos, cuestiones como el deshecho, el desmembramiento emocional, lo abyecto , el desgarro, se reinterpretan y establecen un dinamismo refractario que particulariza la vasta obra dramática performativa kurapeliana. De esta manera el autor-escénico plantea la alteridad no sólo desde la diferencia , sino desde lo irreductible, situándonos en un dilema de orden filosófico en el sentido de habitar el margen, el borde interior-exterior .
“La alteridad así concebida tiene relación con habitar la fractura, develar la carencia (lacaniana) pensar lo impensable, nombrar lo innombrable. La alteridad es pharmakón, aquí y allá, indecible pero determinable y, en esto la práctica deconstructivista de Kurapel se asemeja a la de Derrida”( El teatro performance de Alberto Kurapel, acercamiento crítico / pág 60).
Dentro de esta línea, que es su sello ya, no me equivoco al plantear que este nuevo texto de teatro performance, CONTRALUCES DE LA ESCENA, que cuenta con 280 páginas y alrededor de 50 personajes, propone una visión crítica desde el arte teatral en relación al país imbunche, el país deforme, el país de ausencias, el país desmembrado que habitamos.
Kurapel Alberto sigue siendo un autor-escénico teatral-creador integral completamente vigente, a descubrir por las nuevas generaciones .