“El camino a lo próximo es siempre el más lejano y por ello el más arduo.
Este camino es el camino de la reflexión. Pero una reflexión monstruosa.
Una reflexión que toca y trastoca nuestros cuerpos de titanes.
Como bien sabía el monstruo antes de lanzarse por la ventana hacia la noche y su abismo,
aunque me sea posible pensar, estoy seguro de que ya no será lo mismo.
— Extracto, parlamento de personaje Frankenstein, obra Monster (pp. 55)
Juan Mateo Iribarren Arrieta (nacido en Santiago, Chile, 1964) es un destacado guionista, dramaturgo, director y actor chileno. Se autoexilió en Bulgaria a principios de los años 80, donde estudió música y cine. A su regreso a Chile, cofundó la compañía teatral Bufón Negro en 1990 junto a Alejandro Trejo, Alejandro Goic, Patricia Rivadeneira y Max Corvalán. También creó el Teatro La Batuta, un espacio que se convirtió en un importante lugar para la escena musical chilena. Su trayectoria como guionista ha sido ampliamente reconocida, destacando su trabajo en películas como Un ladrón y su mujer, Fuga y Tony Manero. Además, ha participado como actor en diversas producciones cinematográficas y televisivas, incluyendo Amnesia, El Chacotero Sentimental, Fuga, Pacto de fuga y El Conde .
Como dramaturgo y director, Iribarren ha abordado frecuentemente temáticas relacionadas con la historia reciente de Chile, la política y la memoria, como se evidencia en obras como Sentido del humor, que recrea los espectáculos montados por presos políticos en el campo de concentración de Pisagua durante la dictadura civil militar chilena, y La condición humana. El trabajo de Mateo Iribarren se inserta y se proyecta desde la dramaturgia post-dictatorial, pero no se limita a ella. Su obra transita hacia temáticas mucho más contingentes y contemporáneas, evidenciando una notable capacidad para reflejar la realidad actual y sus conflictos.
Reseñas de obras :
1. El Divino Anticristo
Esta obra se centra en la figura de José Onofre Pizarro Caravantes, el “Divino Anticristo”, un personaje icónico de las calles del centro de Santiago, conocido por sus fanzines y su particular filosofía de vida. Iribarren escribe la obra y también la ha personificado, demostrando un acabado estudio e inmersión en el personaje.
Temática: La obra explora la locura como una forma de resistencia o una elección ante la “normalidad” del mundo, la marginalidad, la santidad y la lucidez que puede esconderse detrás de lo que la sociedad tacha de “locura”. Es un espejo de la “esquizofrenia chilena”, como lo ha descrito el propio Iribarren, reflejando las contradicciones y absurdos de la sociedad.
Contexto: Se nutre de una acuciosa investigación sobre la vida del Divino Anticristo, lo acompaña un personaje femenino, Lily (basado en la “Bailarina del Bella”), que también representa la vida callejera y sus códigos. La obra se desarrolla en las calles de Santiago, haciendo referencia a la historia reciente de Chile a través de los ojos de sus personajes.
Estilo: Es un texto que rompe con la linealidad, a menudo presentando un delirio que, sin embargo, revela una profunda cordura. Combina el drama con el humor, la risa y la tragedia, sumergiendo al espectador en un universo de marginalidad y reflexión.
2. Monster (Segundo lugar, Premio Literario Dramaturgia 2024)
Escrita en tres actos, esta obra es una sátira que aborda la relación del hombre con la tecnología y el poder de la inteligencia artificial, así como sus implicaciones éticas y sociales. Es un ejemplo de cómo Iribarren se mantiene contemporáneo, incorporando temas actuales y provocadores.
Temática: La obra explora la idea de un “monstruo” en la actualidad, no necesariamente físico, sino como una entidad que puede ser creada por la propia sociedad o la tecnología. Aborda las políticas neoliberales y la exclusión social, así como las violencias que emanan de un sistema que deshumaniza.
Contexto: Utiliza la figura del monstruo del clásico universal “Frankenstein o el moderno Prometeo”, la icónica novela gótica escrita por la autora británica Mary Shelley (1818), como una metáfora para reflexionar sobre “el otro”, lo desconocido y lo que nos genera temor. La obra se pregunta sobre la resistencia en un mundo que se “idiotiza”, y cómo las definiciones sociales y políticas pueden hacernos retroceder a estados decadentes y barbáricos.
Estilo: Es una obra que se nutre del humor negro y la ironía para realizar una crítica aguda. Se la ha descrito como una pieza que “cuchufletea” y “pasa gato por liebre”, invitando a la reflexión sobre cómo se han cambiado los nombres a las cosas y cómo esto ha afectado la realidad.
3. Sentido del Humor
Escrita en veinticuatro cuadros o escenas, la obra es una conmovedora exploración de la resistencia humana durante la dictadura militar chilena a través del humor.
Temática: Reconstruye la historia de un grupo de presos políticos que, en los centros de detención, montaban espectáculos humorísticos para sobrellevar la tragedia y salvar sus vidas y las de otros compañeros. Es una poderosa reflexión sobre cómo la risa puede ser una herramienta de supervivencia y dignidad en las situaciones más extremas.
Contexto: Basada en experiencias reales de figuras como Jorge “Chino” Navarrete y Óscar Castro, quienes utilizaron el humor para resistir en campos de concentración. La obra aborda el “desparpajo” de reírse de cosas que, a priori, no causan risa, mostrando la entereza necesaria para procesar el dolor a través de la ironía.
Estilo: Combina lenguajes artísticos, destacando el uso del clown como herramienta visual, inspirándose en la tradición del circo chileno y el payaso trágico-cómico. La obra es tanto divertida como sangrienta y tortuosa, reflejando la complejidad de las experiencias que relata. Es un texto que, a través de la risa, invita a la memoria histórica y a la reflexión sobre la prisión política sucedida en la época.
4. La Condición Humana
La obra La Condición Humana se enmarca en el interés de Iribarren por cuestionar y explorar las complejidades de la sociedad y la moralidad, a partir de un juicio a un mirista converso acusado de asesinar a su torturador.
Temática: El título por sí mismo sugiere una indagación en los aspectos esenciales de la existencia humana, la ética y las decisiones morales. Se sabe que una de sus versiones ponía al público en el rol de “juez”, lo que indica una confrontación directa con la audiencia sobre temas de justicia, culpa y responsabilidad individual y colectiva. Los espectadores, al final, deben decidir entre dos cierres de obra posibles, induciendo de alguna manera a una toma de posición “ficcional” dentro del relato escénico, pero que sin duda es una metáfora del rol de sujeto político crítico que se debería ejercer en sociedad.
Contexto: En el contexto de la dramaturgia de Iribarren, es probable que esta obra también dialogue con las secuelas de la dictadura y las tensiones sociales que surgieron en la post-dictadura. Es una reflexión sobre cómo las experiencias extremas o las situaciones límite ponen a prueba la verdadera “condición humana”.
Estilo: Al igual que en sus otras obras, Iribarren utiliza un lenguaje incisivo y provocador para enfrentar al espectador con dilemas morales y sociales.
Conclusión
En conjunto, estas obras muestran a Mateo Iribarren como un dramaturgo fundamental que no teme adentrarse en las zonas oscuras de la sociedad y la historia, a menudo con un humor negro-ácido y una mirada incisiva. Su teatro funciona como un espacio para la reflexión crítica, la memoria y la confrontación en sus múltiples facetas, proyectando su visión desde el pasado reciente de Chile hacia los desafíos más acuciantes del presente. A través de su prolífica producción, Iribarren honra la tradición de una dramaturgia comprometida con su tiempo, proyectándola al presente , consolidándose como una voz indispensable para entender las complejidades de la sociedad chilena contemporánea.
Bibliografía:
Iribarren, Mateo. El Divino Anticristo. La Maña Ediciones, 2023.
Iribarren, Mateo. Monster. La Maña Ediciones, 2023.
Iribarren, Mateo. Sentido del Humor. La Maña Ediciones,2023.
Iribarren, Mateo. La Condición Humana. La Maña Ediciones,2023.
T.K.